martes, noviembre 01, 2011

La princesa


La princesa creció escuchando las historias de la cenicienta y blanca nieves.
Ella siempre pensó que por su condición de princesa ella también esperaría el principe azul.
Esperó muchos años, conoció muchos duques, varios principes de diferentes colores.... pasaba el tiempo y nunca llegaba el azul.
En la realeza todos siempre le hicieron creer que tendría su propio cuento, sólo que ella tenía que darse cuenta de como se escribiría su propia historia.
Un día la princesa cabalgando se cayó.
Aturdida miró sus piernas en una de ella se hizo una herida, toco la herida y se dio cuenta que su sangre era roja.
Tan roja y viva como una gran manzana, fue ahí cuando se dio cuenta que no tenía sangre azul y que por ende no existían principes azules. Sonrió y se dio cuenta que sólo existían niños lindos y reales, tan reales como ella.

jueves, abril 28, 2011

La lavandería


Deberían existir las lavanderías para corazones,
ya que hay varias manchas que no salen al primer lavado,
ni al segundo,
ni al tercero,
ni nunca.

Así uno podría tomar su corazón y echarlo a la canasta junto a los otros que también necesitan limpiarse.
Mientras la espera se te hace lenta, miras como va dando vueltas y salta de una espuma a otra.
Salen las manchas de a poco pero salen, le quitan el exceso de agua y va recuperando su tamaño y textura ligera.

La chica de la lavanderia me dice " mira que lindo se que ve limpio y brillante"
Le dejo una propina y recibo mi corazón feliz, me despido y le digo: hasta luego.
Sé que no será la primera, ni la última vez que se lo venga a dejar.

jueves, octubre 14, 2010

Miré en dirección al sur.


Miré en dirección al sur, el cielo está rojo o amarillo cambia de colores y hace frío en una ciudad que faltaba el sol.
Miré en dirección al sur, sólo me abrigue y esperé a que llegaras mientras fumaba.
Miré en dirección al sur, de verdad me gustaría estar allá.

Ahora está morado, ahora blanco. Tomé una rama imaginando que tomaba tu mano, que extraño y que lindo momento.
Miré en dirección al sur, hace mucho no respiraba. Te imagino feliz,sé que lo estas. Mis buenos deseos van hacia ti.
Más allá de los arboles vi el mar, te vi.

¿Bailamos? Quiero bailar.
Magia, felicidad y lo que sea que pase. Miré en dirección al sur.
=)

domingo, junio 27, 2010

Camino al cielo.


La vida debería existir hasta cuando uno quisiera. Con esto no intento fomentar el suicidio por decisiones inmaduras, si no que digo que cuando ya estemos viejitos y tengamos un mal pasar, ojalá crucemos la línea de forma rápida. Me carga ver la gente sufrir en sus últimos días. Lo digo con toda la rabia del mundo, espero que mis hijos o familiares no me vean morir agónicamente, perdiendo la noción de la realidad, perdiendo los sentidos y cada signo vital.

Lamento haber visto a mis tías morir así, espero que cuando me toque ver a resto de mis familiares no sea con estás extendidas entradas camino al cielo y por sobre todo espero que nadie sufra por verme morir así.

sábado, mayo 15, 2010

Bulimia


Nunca pensé tener esta enfermedad, pero esas casualidades de la vida me hicieron ver
una y otra vez las fotos de cada vez que vomité alguna palabra y luego me las seguí comiendo.

No recuerdo cuando fue la primera vez, supongo que fue hace muchos años en que no podía para de comer. Estas palabras eran frescas y sabían a esperanza, las masticaba y disfrutaba como si fueran el plato más fino de una frase de poesia. Pero luego comenzaba el remordimiento,corría al baño, ya no era capaz de pronunciarlas, metía mis dedos y las vomitaba.

Fue así como comenzó mi adicción, muchas veces lo oculté de los seres que me rodeaban
no quería que supieran que mi corazón estaba gordo de palabrería barata. Lo hacia a escondidas me comía cada una de las palabras que me vendía el señor chatarra. Es más siempre me insitó a comprar más, dandome las mejores ofertas y supuestos estrenos exclusivos, luego pasaban unos días y ya no las aguantaba más.

Compré tantas palabras, que incluso ya tenía mis favoritas y sabía de memoría como se sentían cada vez que las tragaba hasta que llegó un punto que dejaron de satisfacerme, claro ya no había novedad en ellas ni cambios de sabores reales ni mejoras en la calidad, aún así con un montón de descuentos igual las compré.

Siento retorcijones en el estomago tal vez aún queda alguna pegada en las paredes,
mis amigas ya me lo habían dicho y no había caso, es muy difícil darse cuenta que uno tiene una adicción pero anoche volví a vomitar y como nunca está vez fui yo quien se autofotografió para ver lo mal que me veía siendo una bulimica verbal.

miércoles, mayo 12, 2010

Le deseamos que tenga un buen viaje.


A esta altura yo no me despido de ti, ni de nadie.
Más bien espero que te vaya bien en tu nuevo viaje,
espero que no lleves esa ropa vieja que ya no te queda
y también te pediría que dejarás los recuerdos y la nostalgía en la vieja casa.
Por favor, no me los envies, ni me busques. yo tengo suficientes con los míos.

A esta altura yo no me despido de ti, ni de nada.
Más bien espero que te re-encantes de los nuevos paisajes que verás, las nuevas personas que conocerás y espero que disfrutes como se siente este nuevo aire en tu cara, lo respires y que se llene de alegrías tu nuevo corazón.

A esta altura yo no me despido de ti, ni de los viajes.
Más bien espero que esta vez sean reales tus palabras que están tan desvalorizadas.
Espero que te tomes enserio las nuevas fronteras que quieres cruzar y también las que no quieres volver a pisar, te lo digo porque ya no quiero ver tu cara llena de polvo y rasguños.

A esta altura yo no me despido de ti, porque siempre son hasta luego.
Y no te confundas con mis palabras porque no esconden segundas lecturas
ni letras chicas, todo esto te lo digo porque yo más que nadie espero volver a verte como siempre esperé que fueras; una persona feliz y sonriente.

Que te vaya bien en tu viaje, porque yo estoy disfruntado el mío.
=)

domingo, marzo 21, 2010

Post terremoto.


Inevitablemente nuestras vidas han cambiado.
He pensado si las cosas volverán a la normalidad, pero siento que estamos parados en la nada que intenta armar un futuro.
Es así como también siento que se reconstruye mi vida.

Después del terremoto (que ni sentí) vinieron las replicas en mi vida.
Comencé a sentir mucho miedo, muchas noches no pude dormir tranquila. Me despertaba y sentía la necesidad imperiosa de no dormir sola incluso pensé en ir a dormir donde mi mamá o mis hermanos.

Me sentía triste, mi ánimo estaba por el piso, no tenía ganas de trabajar ¿ y quién tenía ganas de ir a poner sonrisas en dónde no las habían? veía que mi dolor era inmesamente pequeño comparado con el de otras personas y me sentí tan inútil, no podía hacer mucho desde acá. Para calmarme doné todo lo que estuvo a mi alcance y aún así no fue suficiente.

Tuve ganas de contactarme con todos, necesitaba saber como estaban y me hizo inmesamente feliz notar la preocupación de mucha gente con la que no hablaba hace tiempo, quedamos de juntarnos, de vernos y parece que en realidad son realmente sanadores los abrazos que nacen del alma. Los que no nacieron también era el momento de perdonarlos y enterralos en el pasado.

Viví llena de angustia, sentía el clásico "nudo en la garganta" quería salir, hacer cosas nuevas, tratar de regalarle sonrisas a mi gente y estar ahí para ellos, aunque ello significara tragarme este asquero miedo.

Se me comenzó a caer el pelo más de lo normal y como esto ya lo viví en otra época de mi vida, sabía que era síntoma del stres. Así también comenzaron a agudizarse mis dolores al colon.

Pensé mucho en las noches ¿qué no estará diciendo la madre tierra? estamos recibiendo devuelta todo el mal que hemos hechos y nuevamente me sentí pésimo ya que no hay mucho que hacer así como vamos.

No tengo miedo a sentirme finita, a morir o no saber que es lo que me queda de vida.
Tengo miedo a no morir satisfecha, sin a verme quedado guardada ninguna palabra de las cual quería expresar o decir y es que a veces es difícil ir de honesto por la vida sobre todo yo que le tengo terror al rechazo, pero esto me a fortalecido a hablar más a botas mis penas, a tomar las decisiones que simplemente me hagan más feliz, a quedarme con la gente que me quiere en su vida y a expresarles lo mucho que yo también quiero que estén en lo que queda de la mía.

inevitablemente mi vida cambió, les puedo decir que mis prioridades son muy distintas a las de hace un mes atrás y estás palabras han sido infinitamente sanadoras.


(Gracias a quien lo lean, los quiero mucho)